Tomb Raider Definitive Edition - Análisis

Desarrollado por Crystal Dynamics nos llega la versión de nueva generación de Tomb Raider con varias novedades gráficas, Tomb Raider: Definitive Edition, del cual os contamos todas las novedades incorporadas en nuestro análisis:

Como os contamos anteriormente, el juego nos relata los intensos y conflictivos orígenes de Lara Croft y su transformación de joven asustadiza a endurecida superviviente. Lara, que solo cuenta con sus instintos y su habilidad para superar los límites de la resistencia humana, tendrá que aclarar la historia tenebrosa de una isla olvidada para escapar de su acoso implacable.

Al principio de la historia, vivimos cómo Lara se embarca en su primer trabajo tras graduarse en la universidad. Muestra miedo ante el peligro, pues al principio carece de confianza en sus propias capacidades y juicio. Aun así, ya vemos gérmenes de lo que será la futura Lara. Tiene un gran sentido del valor. Es lista, ingeniosa y decidida.

Jugablemente conserva los mismos elementos que la anterior versión, desarrollándose la historia en una inmensa isla, aunque sus caminos suelen ser bastante lineales. No existen tiempos de carga entre zonas y siempre podemos volver a visitar ciertos lugares en busca de nuevos secretos. Como ya os contamos en el anterior análisis el juego mezcla acción, aventura, plataformas y puzles.

Lara está herida y desarmada al comienzo, aunque poco después empieza a hacerse con los primeros utensilios para su supervivencia. El juego está pensado sobre todo para ser sigilosos, recompensándonos por ello, pero también abundan los tiroteos. Existen momentos puntuales en los que usamos QTE, que además son bastante intuitivos. Para obtener recursos y puntos tenemos que recolectar objetos, plantas y cazar animales, siendo la fauna muy variada y encontrándose por toda la isla. Algunos de estos animales son peligrosos y no dudan en atacarnos, por lo que se recomienda ir con precaución.

Desde el comienzo Lara cuenta con el Instinto de Supervivencia, una visión especial que nos permite ver los elementos clave resaltados para ayudarnos a avanzar en la aventura, mostrándose todo lo demás en blanco y negro.

Para adquirir nuevas habilidades Lara gana puntos de experiencia que podemos canjear en un campamento. Éstas se dividen en Cazadora o Superviviente entre otros, haciendo que mejoren las distintas características del personaje. También se puede mejorar las armas y herramientas mediante los recursos que vamos consiguiendo.

Dependiendo de la plataforma elegida, tienen características únicas. En Xbox One podemos utilizar Kinect para cambiar entre las distintas armas, navegar por el menú, girar e inspeccionar las reliquias con gestos de la mano y encontrar nuevos puntos de vista apoyándose en el mundo. En PlayStation 4 la luz del DualShock 4 se ilumina de color naranja y rojo cuando utilizamos la antorcha y parpadea cuando Lara está disparando, además de oírse la radio por el altavoz del mando y poder jugar a distancia con PSVita. En ambas versiones se puede controlar a Lara mediante comandos de voz.

También encontramos misiones secundarias en forma de tumbas secretas que alargan más la duración de la aventura.

Como complemento cuenta con un multijugador online que se divide en cuatro modos diferentes: Rescate, Duelo por equipos, Todos contra todos y Llamada de Auxilio. Podéis encontrar más detalles de los mismos en el análisis del modo multijugador de la anterior versión, ya que no hay ninguna diferencia que no sea gráfica.

Las mayores novedades de esta entrega respecto a las de la pasada generación son sobre todo gráficas, mostrando Lara un nuevo modelado para sacar partido de la capacidad de las de las consolas de nueva generación.

Una de ellas es la utilización de la tecnología TRESS FX, que ofrece una simulación realista del pelo y el movimiento activo de cada mechón, afectándoles el movimiento de Lara o los distintos. Todos los efectos de sombras e iluminación han sido revisados para mostrar en carne viva las cualidades físicas de Lara en una aventura plagada de sudor, barro, materiales ensangrentados y efectos.

Su mundo ahora se muestra mucho más vivo gracias a las complejas simulaciones físicas de los árboles, el follaje, los tejidos, el tiempo atmosférico, la iluminación y los efectos. Todas sus texturas han sido mejoradas, mostrándose a una resolución cuádruple para ofrecer la mayor calidad y detalles posibles. Todos los personajes del juego, incluidos enemigos y personajes secundarios, han sido realzados, además de la destructibilidad, para ofrecer una mayor profundidad y realismo.

Junto a todo ello se ha implementado la tecnología de representaciones faciales y de objetos Subsurface Scattering para capturar la simulación de la iluminación con la mayor fidelidad posible y ofrecer una mayor credibilidad.

La cantidad de sangre que cubre a Lara en ciertas ocasiones ha sido reducida, dando ahora un aspecto más sucio y realista a la protagonista.

Como no podía ser menos todo el juego cuenta con resolución en Full HD (1080p) y, al menos en PlayStation 4, a 60 frames por segundo, aunque cuenta con ligeras caídas puntuales. Por ahora desconocemos la tasa de frames a la que funciona en Xbox One.

Incluye todos los contenidos descargables lanzados en la versión anterior, como la Tumba de los Aventureros Perdidos y, para el modo multjugador online, ocho mapas, seis armas, cuatro personajes y seis trajes para Lara.

Cuenta con un logrado doblaje al castellano y un sonido envolvente con una gran cantidad de efectos que hacen que el entorno parezca más vivo. Junto a ello encontramos melodías que destacan y acompañan bien a la aventura.

En conclusión, Tomb Raider Definitive Edition es un juego que nos ofrece mejores gráficos y ambientación, pero que jugablemente no ha evolucionado nada desde la anterior versión.
Cuenta con todos los contenidos descargables lanzados para el juego original y nuevas características únicas de las nuevas consolas.

Un título muy recomendado para aquellos que no disfrutaron en su día de la aventura, pero que no aporta nada nuevo a los que ya lo jugaron, sin contar la mejora de los gráficos.