Bravely Default - Análisis
Square Enix lanza en occidente su esperadísimo juego de rol para Nintendo 3DS, Bravely Default
Square Enix lanza en occidente su esperadísimo juego de rol para Nintendo 3DS, Bravely Default, que mezcla gráficos y sistema de combate clásicos con novedades que lo hacen muy apetecible. A continuación os contamos todo en nuestro análisis:
Su historia nos traslada hasta el mundo de Luxendarc, que se ve sumido en la oscuridad después de que un gran abismo desgarrase la tierra. Los cuatro cristales elementales que llevan la luz al mundo – fuego, agua, viento y tierra – son consumidos por una fuerza arrolladora, provocando una alteración en el equilibrio de la naturaleza. Volcanes que llevaban un largo tiempo inactivos entran una vez más en erupción, y los océanos se vuelven turbios y peligrosos.
Gracias a los acólitos residentes de su templo, quienes sacrifican su vida para protegerla del horror que asedia al cristal del viento, Agnès Oblige, vestal del viento, salva su vida. Guiada por un hada de cristal llamada Airy, Agnès emprende un viaje para despertar los cristales y devolver la luz a Luxendarc. Junto a ella estará Tiz Arrior, único superviviente de la catástrofe que engullió el pueblo de Norende en el abismo, que se une a su misión para reconstruir su hogar y reparar los daños que la oscuridad ha traído.
En su misión se encontrarán con misteriosos aliados y terribles enemigos de todos los rincones de Luxendarc, desde el gentil reino de Caldisla hasta el centro industrial Ancheim.
Jugablemente conserva las batallas por turnos de los clásicos JRPGs y la exploración de los escenarios en busca de tesoros. En esta ocasión vuelven los trabajos, que permiten que nos especialicemos en ciertas disciplinas y que aprendan toda clase de movimientos a medida que aumentamos su nivel, y el mapa mapamundi, por el que nos desplazamos y en el que se generan combates de manera aleatoria, por lo que será imposible evitarlos. En su lugar se ha añadido la capacidad de ajustar la velocidad de la batalla, haciendo que se pueda variar en cualquier momento para que no se hagan pesados.
En estos combates se nos da la opción de atacar, utilizar habilidades u objetos, o huir, además de otras novedades que os detallamos a continuación. La primera de ellas es el sistema Brave y Default, con el que podemos reservar turnos mientras nos defendemos para utilizarlos de manera consecutiva en el siguiente. Con Default acumulamos los turnos, hasta un total de tres veces, y con Brave los utilizamos como creamos conveniente. También se puede tomar prestado el poder correspondiente de turnos venideros, pero si no disponemos de Puntos Brave (PB) nuestro medidor entra en números rojos y nos deja indefensos, aunque recuperamos el poder con el tiempo.
Junto a esto se encuentra el sistema Bravely Second, que sirve para detener el tiempo pulsando el botón start, paralizando a los enemigos y en el que tomaremos las decisiones que creamos convenientes. Bravely Second, además, es el nombre que se le ha dado a la recientemente anunciada secuela del juego.
Cada arma que equipamos cuenta con su propia gama de movimientos especiales que se pueden personalizar, ya sea poniéndoles su propio apodo o definiendo el grito que utilizará nuestro personaje al ejecutarlo. A estos movimientos se les puede dar un toque personal cumpliendo ciertas condiciones para reforzarlos con efectos adicionales.
Otras de las novedades es el sistema de Invocar amigo que, además de permitir intercambiar movimientos especiales con otros jugadores, los llama para que aúnen sus fuerzas con nosotros en el fragor de la batalla.
Entre las ventajas de la comunicación de la consola se encuentra el poder intercambiar datos mediante Streetpass para reconstruir el pueblo en ruinas de Norende, que de vez en cuando también se verá atacado por criaturas llamadas némesis. Si los derrotamos, obtenemos objetos especiales que nos ayudarán en la aventura. A medida que nos encontramos con un mayor número de personas por el servicio Streetpass, más recursos tenemos para la reconstrucción.
Una vez conseguidos los habitantes, lo siguiente es asignarles tareas. Seleccionamos el edificio a construir, decidimos el número de trabajadores para ese cometido y observamos cómo el pueblo va cobrando vida de nuevo. Cuanta más mano de obra destinemos a cierto cometido, más se agiliza el proceso de construcción.
Si necesitamos otro movimiento, pero no hemos potenciado el nivel de trabajo de nuestro personaje lo suficiente, podemos activar Abilink para tomar prestadas habilidades de un nivel de trabajo alto que nuestros amigos hayan obtenido con sus personajes.
Gráficamente cuenta con escenarios prerenderizados con un logrado efecto tridimensional que los llena de vida, demostrando que se puede ser clásico e innovar. Sus personajes de estilo deformed encajan a la perfección en el diseño. Artísticamente es una delicia en cada uno de sus paisajes.
Su apartado sonoro se adapta a la perfección con cada tramo de la aventura, con melodías épicas, buenos efectos de sonido y voces, tanto en inglés como en japonés, muy bien sincronizadas. Incluye subtítulos en castellano de gran calidad.
En conclusión, Bravely Default es un gran JRPG que conserva los clásicos combates por turnos y añade nuevas mecánicas jugables muy atractivas, aprovechando las características de Nintendo 3DS, con montones de horas de juego y muchos secretos por desbloquear. Además, algunos eventos solo están disponibles a cierta hora del día, por lo que es esencial el ciclo día/noche incluido.
Su apartado gráfico es una delicia en todos sus aspectos, con bellos escenarios prerenderizados con un efecto 3D que le da profundidad y espectacularidad, junto a una dirección artística espléndida.
La banda sonora, sus efectos de sonido, las voces y todo el conjunto, hace que el apartado sonoro sea uno de los aspectos más llamativos del juego junto con su diseño artístico.
Bravely Default es un título muy recomendado para los seguidores de los clásicos Final Fantasy, contando con un gran mapamundi a recorrer, montones de habilidades a aprender mediante los trabajos y un estilo de juego muy similar.